Mayor rentabilidad y un nuevo nicho, así se consolidó Sofía Sorprende

Con el estudio del modelo de negocio y el análisis de los públicos, se generó una mejor organización, orientación y proyección de la empresa. Con el acompañamiento De Mis Manos llegó una nueva oportunidad de negocio más rentable.
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“Se replanteó todo. Prácticamente, era un emprendimiento que estaba sin bases, sin estructura”, así comienza el relato de su reingeniería Sofía Quintero Peña, creadora de Sofía Sorprende, una empresa especializada en regalos.

 

Con De Mis Manos organizó sus cuentas, definió el concepto de su producto, identificó a su cliente y entendió que la experiencia es lo más buscado por su público. La historia tiene un buen desenlace, la empresa va creciendo y abriendo nuevos nichos de mercado, con mayor rentabilidad. “Desde la estructuración logramos llegar a las empresas a vender regalos corporativos”, comenta la empresaria y agrega que es allí donde pondrá su mayor energía.

 

Mirando un poco por el retrovisor se ve a Sofía como una comunicadora con alma de artista. Renunció a su trabajo para dedicarse a su empresa de regalos personalizados, sueño que tenía guardado desde hace años. Un mes después del inicio de la cuarentena por la pandemia, quiso darle fuerza a su emprendimiento mostrándolo en Instagram. Pautó pero nada parecía ser tan eficaz. Consiguió publicidad gratis con influenciadores, se capacitó por su cuenta y se comprometió un ciento por ciento con el contenido de redes para acercar clientes y que se viera reflejado en sus ventas. Aprendiendo con ensayo y error fue avanzando.

 

Por un “en vivo” en las redes sociales, en el que se entrevistaba a un empresario asesorado, se enteró de los servicios y resultados que se obtenían con la asesoría De Mi Manos. Sin dudarlo mucho realizó la inscripción.

 

La orientación

 

“Requería acompañamiento para entender cuál podría ser esa promesa de valor con la que pudiera competir ante tantas ofertas que hay en el mercado: marcas que ya llevan un tiempo importante, 10 ó 15 años generando estas propuestas a las audiencias; y otras emergentes”, en este punto que nos cuenta el asesor empresarial De Mis Manos, Edwin Cabarcas, está la importancia de la orientación a Sofía Sorpende.

 

Emprendieron el trabajo de hacer esa ruta, donde pudiera explorar más sus activos y su pasión, “traducida en productos y servicios que le pudieran generar sostenibilidad en el tiempo ante el mercado”, agregó el asesor.

 

A partir del catálogo de regalos personalizados, construido por la empresaria previamente, se le acompañó en la comprensión del modelo de negocio y en la caracterización del público que atendía en esos momentos. “Es indispensablemente tener un archivo de Excel que tenga unas fórmulas, que nos ayude a automatizar toda la información y de esa manera, nosotros como emprendedores, ser más prácticos al momento de enviar una cotización, de ingresar los precios de los insumos. Es una asesoría fundamental para cualquier emprendimiento”, explica su aprendizaje Sofía, quien abandonó el cuaderno con el que comenzó.

 

En primera instancia, se evaluaron los costos. En cuanto a lo segundo, se estudiaron diversos factores en su audiencia, inclusive psicosociales. Esto le dio claridades sobre el arquetipo de cliente de mayor probabilidad de conexión. Esto permite ir al mejor nicho y generar contenido que contenga esa promesa de valor, generar una forma de comunicación que conecte con la tribu social y mantener esa relación en el tiempo.

 

“Desde la parte de desarrollo empresarial nos dimos cuenta que Sofía Sorprende tenía unos regalos muy lindos pero que no tenían concepto, lo cual hacía muy difícil que las personas identificaran cuál era la esencia de la marca, de los productos. Desde ahí venimos haciendo una segmentación del mercado, los estudiamos para comprender qué tipo de clientes son los de Sofía Sorprende y de esta manera cómo sería la comunicación desde redes sociales”, cuenta la empresaria, quien agrega que estructuraron mejor la oferta del producto, mejorar la atención al cliente y también establecer principios y atributos de la marca.

 

Por otro lado, la operatividad tuvo que ser replanteada. “Tenía un plan de acción semanal. Cada día tenía actividades de entregas, logística, planeación. Pero la capacidad de producción era baja, pues al ser un producto personalizado requiere tiempo, inclusive de ensamble. De ahí se fueron evaluando las posibilidades para presentar propuestas a otro tipo de público”, explica Edwin.

 

Se le acompañó en el tema de costos para valorar la producción y la logística, para una mejor comprensión del margen de rentabilidad que le generaban los precios que tenía definidos. Materializó una plantilla de cerca de 100 productos donde reconoce el margen de cada uno. Esto le permitió generar economías de escala, orientando la energía hacia los productos de mayor rentabilidad e inclusive dejar de presentar en el catálogo opciones porque no le eran tan rentables. “Le dio claridad para remunerarse como empresaria y como trabajadora de su propia empresa”, apuntó Edwin. “Eso fue lo primordial, porque yo no lo hacía, no incluía mi trabajo, no tenía ni idea de eso”, agregó Sofía.

 

Entonces este ejercicio le permitió ver cómo podía planear diferentes escenarios, puntos de equilibrio, presupuestos de unidad para lograr pagos en los diferentes roles. Al tiempo que alcanzó una comprensión sobre el punto de equilibrio, cuánto tenía que vender para generar ganancias, ahora sí como propietaria. Son diferentes las finanzas empresariales y personales, pensar que todo es ganancia es un error común en las personas empresarias que recién comienzan. Esta capacitación fue clave para Sofía y lo será aún más en la medida en que crezca su nómina.

 

El mercado le comenzó a responder de manera distinta. “Comienza a tener una conexión orgánica con otro público, uno corporativo”, detalla el asesor. Esta nueva relación era de corto plazo, con inversiones específicas y con mejor rentabilidad. “Esta economía de escala era mucho mejor que la venta uno a uno de sus productos bandera. Este fue el logro más importante”, agregó el asesor que esto le abrió una posibilidad de negocio mucho más amplia. Obtuvo una nueva perspectiva, un nuevo mercado, mejor rentabilidad.

 

Consejo de Sofía: “Nunca dejar de aprender, de invertir en el conocimiento. Pero lo más importante: busquemos ayuda profesional, porque nosotros apenas estamos empezando en este camino, está la Corporación ya lleva muchos años de experiencia en la orientación de emprendedores para que los emprendimientos para que escalen y obtener resultados excelentes”.

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