La empatía es la respuesta, no le demos más vueltas, te lo decimos en el primer renglón. El generar vínculos con tus clientes mediante la empatía se trata de sacar lo mejor de ti para sacar lo mejor en el otro, escuchar, entender, ponerte en los zapatos del otro, generar soluciones, conectar.
En estas líneas te contamos para qué sirve eso llamado empatía en tu emprendimiento o empresa:
- Desarrollarla es muy importante porque nos ayuda a formar ese círculo virtuoso de recompra mediante el relacionamiento; es decir, se trabaja en establecer excelentes relaciones para fidelizar a tu público.
- También te permite conocer a profundidad cuáles son las necesidades de tu cliente y de esta manera crear una conexión entre estas y tu oferta, sea un producto o un servicio.
- También ayuda a que llegue la confianza a esta relación.
- Se encuentran soluciones de forma más fácil y rápida, si conoces de manera más cercana a tu cliente.
- Hasta puedes predecir el comportamiento que tendrá ante un producto o servicio.
¿Cómo lo hacemos?
Ahora sí, entremos en materia. Para unos es más fácil generar estas conexiones que para otros, pero lo cierto es que el ser humano es social por naturaleza, así que imposible no es, ni tienes que ser el “alma de la fiesta”, todos podemos ser empáticos, sea cual sea nuestra personalidad.
Toma nota de estas pautas para que se te haga más fácil:
- Cuando interactúas con tus clientes, cuando generas esa cercanía, cuando los haces sentir respetados, comprendidos, escuchados, son elementos que nos ayudan a seguir estrechando esos lazos relacionales con nuestro público.
- Tener conversaciones muy respetuosas y no reaccionar ante nada, tranquilidad ante todo.
- Llamarlo siempre por su nombre hace que se sienta recordado, tenido en cuenta, importante.
- Sostener una escucha activa, que en las conversaciones tus clientes hablen más que tú, así conocerás sus necesidades, qué es lo que quieren, cómo se sienten, qué opinión tienen acerca de lo que ofreces.
- Brinda soluciones a los problemas que identificas, de acuerdo a esa conversación, y analiza cómo puedes conectar tu producto o servicio.
- Siempre mira a los ojos, sonríe y muestra tranquilidad.
- Observa la comunicación no verbal de tu cliente, para que puedas dar giros interesantes a la conversación.
- Esto es lo más importante: demuéstrale que en realidad te interesa como persona, cómo está y que le ayudarás; no quieres que perciba que solo te importa una transacción, créelo, eso se nota.
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