Samaná se prepara para crecer con nuevos negocios

Samaná viene de los bosques del Oriente antioqueño, fue creada por la administradora de empresas Claudia Rojas y el comunicador y periodista Esteban Vanegas, quienes materializaron esta iniciativa a inicios de 2019.

“Es un proyecto de apicultura, el propósito principal es la conservación de los bosques y tenemos un impacto social y ambiental. El primero lo desarrollamos enseñándole sobre el manejo de las abejas a campesinos de la zona y en contrapartida nos ayudan a conservar más hectáreas de bosque en sus predios; en la parte ambiental está todo el trabajo con las abejas y la conservación, tenemos las colmenas dentro de un bosque húmedo en San Luis y ahí estamos haciendo todo el proyecto tanto de transformación como de capacitación”, explica Claudia.

De los productos cosechados en la finca se comercializa la miel y el polen, también hacen transformaciones como miel picante, miel con CBD y chocolate relleno con miel cremada.

Un año después del inicio de esta historia, comenzó el capítulo con De Mis Manos. Tomaron varios cursos como manejo de redes sociales y compartieron su experiencia de cómo fue emprender en pandemia. Se acercaron aún más y comenzaron el trabajo con diseño de producto, por lo que se amplió el portafolio. Son muy dinámicos y participan en varias actividades propuestas por esta comunidad, como lo son ferias y muestras.

Además de estar en las Tiendas De Mis Manos, Samaná se encuentra en nueve comercios más en la ciudad, sumado a su actividad en redes; pero lo que ha sido fundamental es el establecimiento de contactos con el mercado corporativo.

“Aprobaron producto para negocios corporativos, esto implica que, con ese negocio, logrado por el área comercial, estas empresas tendrán una evolución importante en su comportamiento en ventas y crecimiento comercial”, enfatiza Humberto Duque, coordinador de la Escuela de Ventas De Mis Manos.

Samaná comenzará a verse en aeropuertos internacionales con su miel y su polen. “La idea es que empecemos a hacer la comercialización. Como este negocio es grande, creo que uno de los más grandes en términos de corporativos, el pedido inicial son 5 mil unidades entregadas en varios meses, para esto De Mis Manos pidió que tuviéramos un acompañamiento en producción, logística y planeación financiera”, anota la empresaria.

Punto por punto se han organizado para el cumplimiento: tiempos de cosecha, costos, flujos de caja para saber cuándo llegará la rentabilidad, anticipos, administración de recursos. “Esto para poder capitalizar la empresa y que, de alguna manera, como que este no sea nuestro cliente principal y descuidemos las otras áreas comerciales de Samaná, sino que esto nos ayude a apalancarnos para crecer muchísimo más”, detalla que también la logística está en la agenda de temas a tratar pues son muchas las dudas a resolver, por ejemplo, la mayor parte de los envíos se entregará en Bogotá, así que hay que ajustar rutas y planes de acción.

La palabra crecimiento es la que está en la mente de los empresarios en este momento. “Este negocio es muy importante para nosotros porque, pese a que ya tenemos muchos clientes, un recorrido y contamos con posicionamiento en Medellín, y estamos desarrollando proyectos importantes con empresas y organizaciones, en términos de comercialización va a ser uno de los clientes más grandes que hemos tenido. Entonces, claramente, nos va a impulsar muchísimo no solo económicamente si no también para apoyar a otros apicultores porque ya supera la demanda que tenemos – dice la empresaria, quien resalta también el hecho de que sus productos saldrán del país- Estamos muy agradecidos con De Mis manos porque ha sido un acompañamiento muy integral”.

Consejo para las personas empresarias es buscar asesoría de organizaciones de la ciudad y comunidades que ofrezcan una buena orientación y que se conviertan, de alguna manera, en parte del equipo, que sientan el proyecto como propio.