Arleth Isabel López Bermúdez es una mujer curiosa, alegre y carismática. Vive en Apartadó con sus dos hijos adolescentes, es diseñadora industrial y ejerció como docente por muchos años; además, encontró hace poco una pasión que le hace vibrar el corazón: Arislober, su emprendimiento enfocado en la salud del cabello afro y rizado.
“Como mujer afrodescendiente tenía estigmas respecto a la apariencia de mi cabello, yo me alisé por más de 25 años. Llegó el punto en el que empecé a tener problemas capilares y por el bien de mi salud me puse a investigar qué podía hacer para recuperar el daño”. Así, cuenta Arleth que nació la semilla de Arislober, su marca que tiene tres líneas de negocio: venta de la línea capilar para cabello afro y rizado, curso digital sobre tricología y consultas particulares sobre el tema.
Comenzó a recibir asesoría De Mis Manos en la Escuela de Ventas, un acompañamiento que cubre frentes de comercialización y marketing. En el camino se dio cuenta que para adoptar las enseñanzas que estaba recibiendo, era necesario complementar el proceso con el acompañamiento del Ser para emprender. Con estas asesorías pudo abordar temas clave como tolerancia a la frustración y la adaptabilidad necesaria para los cambios.
Por supuesto, emprender no es fácil, es un camino de retos que van surgiendo día a día. Por lo tanto, es muy común que las personas tengan altibajos en su estado de ánimo y afectaciones en su salud mental al emprender.
Consejos para cuidar tu salud mental al emprender
Desde el acompañamiento del Ser para emprender, la asesora de Arleth, Jael Maryori Betancur, plantea las siguientes recomendaciones que debes tener presente si decides emprender.
- Identifica tus metas. Al tener tus propósitos claros podrás establecer una ruta de acción con mayor facilidad, lo que ayuda a evitar la ansiedad y la angustia en el proceso.
- El camino no es lineal. Recuerda que puedes tener desvíos. Lo más importante es saber que cuando algo no sale cómo lo tenías planeado no quiere decir que no estés avanzando hacia la meta. Procura mantener la mente abierta a nuevas maneras de hacer las cosas.
- Ten una red de apoyo. Contar con personas que amamos siempre será un alivio en situaciones difíciles, por eso, conversar con amigos y familia sobre las diferentes situaciones del día a día es fundamental. ¡Saca tiempo para compartir con ellos!
- No está mal pedir ayuda. Es natural que haya momentos en los que sientas cansancio o, incluso, quieras abandonar el proceso. No olvides que pedir ayuda no es sinónimo de debilidad.
- Aprende a delegar. Para ser emprendedor no tienes que saber de todo, habrá un momento en el que podrás aliviar cargas y dejar procesos en manos de otros. Además, despeja tu mente estableciendo horarios y realizando actividades que te gusten.
- Todo lo que aprendes te fortalece. No todas las situaciones están en tu control, así que cada vez que hay dificultades y logras superarlas, adquieres herramientas para acontecimientos futuros. Más allá del problema, mira tanto la solución como el aprendizaje que puedes obtener.
Para Arleth, el acompañamiento Ser para emprender De Mis Manos ha sido crucial en su visión como emprendedora. De hecho, gracias a las alianzas con servicios psicológicos en Apartadó, decidió empezar su proceso de consultas para abordar más temas a profundidad.
“Todo el acompañamiento me ha ayudado mucho. Siempre he estado motivada, pero ahora me siento más tranquila de esperar los resultados del emprendimiento, soy más consciente del proceso”, afirma Arleth.
Actualmente, ella continúa con asesorías De Mis Manos en marketing y ventas. También, desea terminar de desarrollar más productos para su línea capilar, que Arislober sea reconocida en el mercado, tener una certificación como productos orgánicos y seguir creciendo.
En De Mis Manos sabemos que tu emprendimiento es casi una parte de ti, recuerda que cuidar tu salud mental es clave para alcanzar el éxito. Encontrar un equilibrio será beneficioso, no solo para ti, ¡también para tu negocio! Contáctanos.