


Esta diseñadora de modas oriunda de El Retorno, Guaviare y graduada como profesional en Argentina, es una madre soltera que trabajó en la industria textil, inicialmente como operaria y poco a poco gracias a su talento fue ascendiendo en los cargos que ocupaba. Su disciplina financiera, aun teniendo pocos ingresos, la llevó a ahorrar para comprarse su primera máquina. Así pudo retirarse del trabajo y no tener que dejar a sus hijos solos en casa.
Desde su hogar comenzó a trabajar para empresas del sector, cosía hasta las 2 y 3 de la madrugada y en hojas de papel escribía su gran sueño: tener su propia empresa, dejar de tercerizar. Observaba a las mujeres que se sentían incómodas e inseguras con sus propios cuerpos, en una cultura que prioriza la estética de los cuerpos delgados y tonificados, y soñaba con hacer para ellas ropa que las hiciera sentirse cómodas y se aceptaran, con telas recicladas, sostenibles, con propiedades de nanotecnología que generan protección y bienestar al cuerpo.
Fue así como su idea de negocio, que presentó a las convocatorias de Capital Semilla, fue seleccionada como una de 100 más innovadoras de la ciudad y su proyecto lo hizo realidad. Hoy tiene dos empresas que venden sus productos a través de Instagram y plataformas virtuales: Baruna y Maria Pía. Baruna ofrece vestidos de baño usando tallas reales que ella misma investigó con la tecnología Body Scaner que encontró en el SENA y @maria.piacol fabrica ropa a la medida para hombres y mujeres que ella llama piezas de arte usables. Ambas marcas emplean telas elaboradas con materiales sostenibles y nanotecnología para el cuidado de la piel.
Su hijo, ya con 19 años, está estudiando administración de empresas y se encarga de administrar ambas organizaciones junto con su hermana. Hoy cuenta con 8 máquinas, generando empleo a otras mujeres. “Mi sueño estaba en mi corazón, en mi pensamiento y en una hojita de papel desde hace tres años. Hoy se llama Baruna y es una marca de verano sostenible que mitiga el impacto ambiental por medio de bases textiles reciclados. Para mí, esa es una mujer empoderada: aquella que sueña, que se apasiona y que lucha por transformar todos sus sueños en realidad” expresa Pía con la certeza de quien ha logrado construir el camino de su propio destino.