Katherine tiene claro el planeador para su empresa

Lo suyo es la pintura, el dibujo, la fotografía, pero sobre todo el emprendimiento; y la fusión de todo esto es la esencia de Soñalia, el nombre que desde ahora tiene su marca.

Hace seis años, cuando todavía estudiaba en la universidad, empezó en una habitación de su vivienda. “Me propuse crear una empresa en donde pudiera articular el arte y la industria, y promover a los artistas emergentes, porque sobresalir en el arte es bastante difícil”, dice Katherine.

Su empresa inició con libretas que lucían las imágenes de pintores, ilustradores y fotógrafos, y la primera sorpresa de Katherine fueron las buenas ventas que tuvo desde el principio. “Pronto empecé a escuchar a mis clientes que me pedían agendas, ordenadores, y mi producto empezó a evolucionar y me enfoqué en hacer artículos dirigidos a mejorar la productividad de las personas”.

Ahora cada objeto de su catálogo incluye la obra de un artista, su ficha técnica y su código QR que permite acceder al portafolio del autor para generar nuevos contactos y alianzas. “La intención es promoverlos a través de estos productos y también llevar el arte a su lugar de trabajo, como una exposición itinerante”, asegura.

Hace dos años Katherine llegó a De Mis Manos, y desde ese momento su empresa comenzó a evolucionar con un rediseño de su marca, muchos más conocimientos administrativos y su propio sitio web, que ganó al destacarse en un concurso entre emprendedores. “Esa fue una gran oportunidad, desde ese momento el sitio web me ha permitido compartir mi catálogo y vender”. 

Katherine también sintió temor cuando llegó la pandemia, pero se dio cuenta que más que enfrentar un problema, se presentaron nuevas oportunidades. “Las personas empiezan a hacer teletrabajo y necesitan organizarse, ahí llego yo con mis productos, mis planeadores, mis agendas. De esa manera aproveché la situación para fortalecer mi empresa”, asegura.

Ella tiene claro que la resiliencia es una de las cualidades de los emprendedores, porque el camino no siempre es fácil. “Nadie puede creer más en tu empresa que tú mismo, debemos ser muy disciplinados, constantes, perseverantes. Medellín tiene un ecosistema emprendedor muy grande, hay muchas posibilidades, una muestra es De Mis Manos”, opina Katherine.

Esa perseverancia la llevó a ganar el apoyo del Fondo Emprender, y ahora su reto es crecer. Además de la formalización de su negocio, su compromiso es generar seis empleos antes de diciembre de este año, para lo que ya cuenta con un nuevo local, ha incorporado a dos nuevos colaboradores, pronto llegará el tercero y su empresa sigue creciendo.

“Quiero ser el lugar de los sueños de las personas, porque en mi planeador es donde ellos escriben sus sueños. El mío es contribuir a la comunidad de artistas, sueño con exportar, con abrir tiendas en las principales ciudades del país. Siempre se va a poder, porque los emprendedores vemos oportunidades donde hay problemas”, concluye.